“El vínculo” entre tu amigo de 4 patas y tú. Hoy en día encontramos diferentes artículos, libros, webs, donde nos aconsejan, para crear un vínculo más fuerte con tu amigo peludo, cosas como:
- Crear rutinas para evitar estrés y ansiedad.
- Jugar para tener una interacción directa y estrechar lazos.
- Prestarle atención cuando estéis paseando, no hables por el móvil o te distraigas.
- Acariciarlo.
- Cubrir sus necesidades básicas.
No digo que no sean importantes estos consejos pero cuantas veces hemos escuchado “a mi perro sólo le falta hablar” o “en casa nadie te da la bienvenida con tanta alegría”. En un estudio de la universidad Azabu de Sagamihara en Japón han comprobado que cuando un perro y su cuidador –responsable (la palabra amo-dueño no está en mi diccionario) se miran a los ojos, ambos disfrutan de una descarga de oxitocina que refuerza el vínculo afectivo.
Esta hormona refuerza el vínculo afectivo madre-hijo durante el periodo de lactancia. Por lo que se concluye que nuestros amigos de 4patas se han adaptado al circuito neuronal humano que había evolucionado para reforzar el vínculo madre-hijo. La oxitocina es una hormona que induce sentimientos de afecto positivo.
Estos resultados se realizaron a partir de muestras de orina antes y después de que seres vivos de 2 patas y 4 patas interactuaran. Cuanto más se miran, señalan los investigadores, más aumenta el nivel de oxitocina tanto en el perro como en su cuidador.
Estoy segura que todos (los amantes del mundo animal) hemos sentido una sensación de bienestar no sólo cada vez que miramos a nuestro amigo peludo sino también cada vez que lo acariciamos, paseamos, llegamos del trabajo a casa agobiados, cansados y él o ellos nos reciben con tanta alegría que no podemos resistir cambiar el chip a positivo, lo hemos experimentado de forma natural, sin saber que existen estudios de este tipo.
El sentimiento que nos une o que hemos creado con nuestro amigo es un profundo amor que nos proporciona bienestar, alegría, cariño y sentimientos/sensaciones que nos ayudan a enfermar menos, resistir alergias, somos más felices, tenemos un corazón más saludable, hacemos más ejercicio (por aquello de las caminatas con nuestros amigos), nos ayudan a disminuir el estrés… Podría escribir otro post con todos los beneficios pero hoy he querido centrarme en el vínculo afectivo entre el perro y su cuidador para muchos un sentimiento inexplicable e incomprensible pero para nosotros, los cuidadores responsables, un sentimiento de bienestar y amor que experimentamos diariamente.
Después de un poco de teoría vamos al grano con los consejos para afianzar o crear el vínculo con tu amigo de 4 patas, la primera de ellas es Meditar…estoy segura que esta palabra que últimamente está de moda o que alguien de tu familia, de tu trabajo o un conocido practica y que a lo mejor piensas “ uff no tengo tiempo o es complicado o simplemente no sabes que es”.
Meditar para mi es lograr pararme, parar mi mundo, mi mente y silenciarme un poco, cuando tenemos la mente agitada por el día a día, nuestras experiencias son confusas, estresantes llenas de altibajos emocionales y pensamientos negativos. Por lo que es importante empezar poco a poco a practicar la meditación de una forma sencilla y en la mejor compañía de todas, nuestros amigos peludos ellos son nuestros maestros viviendo el aquí y el ahora, viviendo cada momento, cada instante intensamente feliz sin pensar en pasado ni futuro, sin desear, ni quejarse de nada ni nadie solo sintiendo el ahora junto a ti.
Así que puedes empezar de una forma sencilla en una posición que te sientas cómoda, respirando profundamente dos veces o cuantas veces lo sientas necesario, relajando todo tu cuerpo, con una sutil música o simplemente en el silencio, cuando notes que te has relajado un poco, invitas a tu amigo a meditar a tu lado (a lo mejor no viene inmediatamente a tu lado, pero cuando note tus vibraciones calmadas estoy segura que estará cerca de ti), importante no tener expectativas si lo estás haciendo por primera vez, simplemente debes dejar fluir el momento tal y como es sin querer cambiar nada, ni modificar nada solo aceptando el instante tal y como es.
En el transcurso del tiempo de la meditación pueden ocurrir varias cosas, a ti y a tu amigo peludo a lo mejor has logrado callar tus pensamientos, o algún ruido te ha distraído, o tu amigo no se ha acercado o al contrario has notado algo diferente en él.
Cada experiencia es única y cada vez que medites será diferente, solo es necesario que inviertas un poco de tiempo cada día o algunas veces a la semana y seguro que notaras cambios, esto es una breve forma de meditar, más adelante compartiré más experiencias e información sobre este tema por ahora puedes empezar a practicar a que no es tan difícil y sobre todo no tengas prisa, ni necesitas invertir mucho tiempo solamente deja fluir el momento.
El segundo consejo es acariciar, aquí haremos énfasis solo en los caninos. Hemos leído varios estudios en los que, según expertos, el contacto físico en humanos es importante hasta el punto de alterar el crecimiento físico y mental de un bebé, el sentido del tacto es importantísimo sin él no tendríamos la capacidad de descubrir texturas ni estar en contacto con seres vivos y sintientes.
Si, ya sé que todos damos amor y acariciamos a nuestros perros y gatos, pero quizás pasas por alto que una caricia puede estimular el funcionamiento y vitalidad de las células en el cuerpo del animal además de ayudar a reducir el stress, mejorar problemas de comportamiento (en caso de tenerlos), entre otros beneficios a nivel de salud, pero en este caso hablamos de una forma de crear y/o afianzar el vínculo con tu amigo de 4 patas.
Lo primero que debes hacer es estar relajado, por ejemplo después de meditar sería un momento perfecto, no quiere decir que solo debas hacerlo en este orden, debes hacerlo cuando sientas que es el momento oportuno.
Existen diferentes toques /caricias pero para empezar esta sutil técnica. Te aconsejo stroking o caricia, lo primero que debes hacer es prestar atención en qué posición esta tu perro, normalmente estará en posición esternal ósea que puedes acariciar desde el cuello hasta la cola, en esta posición tocas directamente las vértebras cervicales, torácicas, lumbares, el sacro y las vértebras caudales (estas últimas son parte de la cola, para los que tienen).
También puede estar de lado- side slepper, una de las posiciones en las que normalmente duermen, aquí acaricias desde el hombro hasta el muslo, tocando más los músculos superficiales como el dorsal ancho, abdominal, deltoides, glúteo.
Y procedes con la yema de tus dedos, de forma muy suave y prácticamente sin presión, en dirección del pelaje, con movimientos zic-zac cada 5 segundos también tiene un efecto relajante casi sedante, ya que relaja el sistema nervioso, debes estar atento a las señales que te da tu amigo cuando lo estés acariciando de esta forma suave, calmada, respirando profundamente y disfrutando de ese instante que os brindáis mutuamente y déjate sorprender de su respuesta.
Estos dos consejos son fáciles de practicar y requieres solo un poco de tiempo para conectar e incrementar la oxitocina- la hormona del bienestar entre tu amigo de 4 patas y tú. Deseo de todo corazón que tengas una experiencia positiva como la he tenido yo con sol y otto.
Un abrazo perruno de love4patas